martes, 27 de abril de 2010

MIEDO A VIVIR


Los miedos son increíblemente apresantes, muy fuertes, son anclajes de nuestro ego que nos sujetan terriblemente para evitar la posibilidad de que florezcamos fuera de la esfera del caos racional en el que existimos, dentro de  la cual reina un tremendo orden opresivo.

Es por ello que debemos esforzarnos por diferenciar los destellos por muy efímeros que se nos muestren de la luz verdadera que emana de nuestra esencia, para hacernos entender que existe y que siempre ha existido en nosotros un contacto íntimo con EL TODO que aguarda impaciente a nuestra expansión en la libertad mas plena y absoluta que existe, EL AMOR,  y que nos recuerda que el único pecado que existe es el que nos aferra al entorno y anclaje emocional que nos aferra....la inmovilidad.